Con Docker, puedes empaquetar tu aplicación junto con todo lo que necesita para ejecutarse sin problemas, sin importar en qué sistema esté funcionando.

Docker es una plataforma que facilita la creación, prueba e implementación de aplicaciones de manera ágil y eficiente. Utiliza contenedores, unidades estandarizadas que incluyen todo lo necesario para la ejecución del software, como bibliotecas, herramientas del sistema, código y entorno de ejecución.

A diferencia de las máquinas virtuales, que requieren un sistema operativo completo para cada instancia, Docker permite compartir el mismo núcleo del sistema operativo, lo que reduce significativamente el consumo de recursos y mejora la velocidad de despliegue. Esto hace que el desarrollo sea más ágil, facilitando la portabilidad y escalabilidad de las aplicaciones.

Otro de sus grandes beneficios es la confiabilidad. Un contenedor ejecutará el software de la misma manera en cualquier entorno, eliminando los clásicos problemas de incompatibilidad entre entornos de desarrollo, pruebas y producción. Gracias a esto, Docker se ha convertido en una herramienta esencial en el mundo del desarrollo y la infraestructura moderna, optimizando el flujo de trabajo de los equipos de software y permitiendo un enfoque más eficiente en la entrega de aplicaciones.

Exponiendo contenedores

docker run -d –name proxy -p 8080:80 nginx (corro nginx y expongo el puerto 80 del contenedor, en el puerto 8080 de mi máquina anfitrión)

localhost:8080 (desde mi navegador compruebo que funcione)

docker ps (muestra los contenedores activos)

docker ps -a (muestra todos los contenedores)

Cambio de nombre a contenedores

docker rename tnder_chaum jenkins8070 (cambio el nombre de tender_chaum a jenkins8070)

Entrar al contenedor

docker exec -it contenedor bash

Apagar contenedor

docker stop <contenedor>

Borrar contenedor

docker rm <contenedor>

Parar el contenedor y lo borra

docker rm -f <contenedor> (lo para y lo borra)

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